En cientos de ciudades de todo el mundo el Día de San Patricio se celebra el 17 de marzo, es decir, ayer. Pero a Tucumán, el santo patrono de Irlanda, ese que tiñe hasta la cerveza de verde como por arte de magia, llegó antes de lo esperado. El sábado a la noche, y aprovechando la inauguración de un nuevo bar temático en Catamarca al 300, los seguidores del santo, del verde -o sólo de la cerveza-, cortaron la calle y le dieron la bienvenida con una gigantesca fiesta que explotó de alegría. Como para no escaparse tanto del calendario, el festejo continuó ayer, en el mismo lugar, pero ya con los decibeles mucho más abajo.

"De las cuatro ediciones que vamos haciendo, esta fue sin duda la más grande. Todos los años vimos un interés creciente por la fiesta, pero no esperábamos que se sumara tantísima gente", admitió Pablo Fanchini, propietario del bar e impulsor de este festejo que, por lo que se vio, ya tiene su lugar propio en la agenda tucumana.

Una mezcla armónica de desenfreno juvenil y alegría familiar se unieron en esta fiesta que mutó su significado religioso al pagano. Impregnados por el espíritu de la iconografía irlandesa, muchos se animaron a vestir sombreros, remeras, antifaces y otros accesorios, siempre de color verde. Incluso la cerveza, como pasa en las principales ciudades donde se realiza la celebración, se tiñó del color de los tréboles y circuló de mano en mano a bordo de grandes jarros de cerámica.

En una mesa eterna en el interior del bar, una buena parte de la tradicional familia Hynes O'Connor -de ascendencia irlandesa-, vivió como en casa el Día de San Patricio. "Nos alegra muchísimo que se festeje acá y que no sea el desborde que hay en Buenos Aires, por ejemplo. La fiesta en realidad es una celebración nacional, que nada tiene que ver con tomar litros de cerveza", resumió Ani Hynes O'Connor, quien se animó a subir al escenario junto con un grupo de familiares para cantar el Ireland's Call, un himno popular irlandés.

Con un poco menos de fervor, anoche el festejó continuó con juegos temáticos. El más llamativo fue el ajedrez cervecero, en el que las fichas del tablero se reemplazan por pequeños vasos con cerveza (un equipo rubia y el otro negra). En este juego el caballo no se come al peón: se lo bebe.

Alegría

Hace cuatro años que se celebra públicamente San Patricio en Tucumán. La de este año fue la fiesta más convocante.

En jarros

El bar organizador ofrecía una variedad de 70 cervezas nacionales e importadas.

Una de las celebraciones más difundidos.- El Día de San Patricio se celebra el 17 de marzo en conmemoración del fallecimiento de San Patricio de Irlanda, patrono de ese país europeo. En la República de Irlanda es una fiesta oficial, pero en Irlanda del Norte (territorio de Gran Bretaña) se circunscribe al ámbito religioso. El Día de San Patricio está entre los más ampliamente celebrados en todo el mundo, no sólo por irlandeses y sus descendientes, sino por pobladores de diferentes países.

Los símbolos.- El trébol (shamrock en inglés) es uno de los símbolos nacionales irlandeses y junto al gnomo juguetón llamado Leprechaun (imagen izquierda) son las dos figuras típicas de la fiesta de San Patricio. Según la mitología, San Patricio de Irlanda (imagen derecha), un obispo misionero, utilizó los tréboles para ilustrar y explicar la Santísima Trinidad en sus viajes de evangelización.

Una familia tucumana vive como irlandesa.- "La celebración tiene por objetivo recordar a San Patricio, el santo que impuso el cristianismo en la isla. Además, la mitología dice que ahuyentó las serpientes de Irlanda. Originariamente era una fiesta religiosa, pero a partir de 1901 se transformó en secular; una celebración popular nacional", explicó Ani Hynes O'Connor, descendiente de abuelos irlandeses e hija de Olga Hynes O'Connor, cuyo nombre lleva una sala teatral de la ciudad. Ani, de hecho, es docente de teatro. Estuvo festejando San Patricio junto a hermanas, primas y sobrinas en el bar temático que centralizó la celebración. Ani contó que todos los conocimientos sobre la cultura irlandesa los aprendieron de su abuelo, quien solía decir que él era "de Irlanda libre", en referencia al sur del país, que logró independizarse de Inglaterra en 1922.